Nuestra escuela, Ser en la luz, es un “lugar” de encuentro y restablecimiento de la comunicación para quienes acudimos a ella. Un espacio en el que el único propósito compartido es el de buscar y encontrar todas las barreras, (pensamientos con los que pretendemos sostener la idea de que estamos separados de nuestra Fuente), que hemos levantado en contra del amor.
Hemos sido creados en el Amor, la Paz y la Abundancia infinitas y, sin embargo, vagamos por un mundo en el que la culpa y el temor al castigo nos mantienen atenazados. Creemos encontrarnos en un lugar en el que nos sentimos impotentes ante los acontecimientos que parecen sucedernos. En la escuela nos ayudamos a mirar y reconocer que esas barreras no son otra cosa que nuestros miedos a la luz que realmente somos. Es el reconocimiento que abre nuestras mentes al des-hacimiento de nuestras viejas creencias y, en consecuencia, a los milagros que el Amor de Dios nos ofrece.
Hemos aceptado que tenemos una función que Dios quiere que desempeñemos y que ha tomado la forma de una escuela en la que ofrecemos actividades con el fin de congregar a aquellas personas que deseen unirse a nuestro único propósito: el recuerdo y la experiencia de que somos el unigénito Hijo de Dios, creados a Su imagen y semejanza para la dicha y vida eternas.